Cuando buceo en mi memoria por los primeros recuerdos de mi viejo, aparezco metido en su cama. Mi vieja duerme y yo no sé si llegué ahí hace un ratito traído por él o si me colé como un polizonte en mitad de la noche. Mi viejo tararea descuidado una canción de la que solo retengo una línea: “vieras qué noche de luna oscura”.