{"blocks":[{"key":"1a6ec","text":"Los madrileños no lo piensan cuando eligen entre fascismo y democracia y Charlotte Beradt descubre que todos soñamos lo mismo bajo un régimen totalitario.","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":154,"style":"fontsize-24"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"b8vjs","text":"___","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":3,"style":"fontsize-24"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"1v3lk","text":"por PATRICIO PRON - CASA DE EMPEÑOS","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":35,"style":"fontsize-18"},{"offset":0,"length":35,"style":"BOLD"},{"offset":0,"length":35,"style":"ITALIC"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"a7jsb","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"3smh8","text":"3 de mayo ","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":10,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"10hpm","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"6a0cl","text":"“No se puede hacer nada […] estamos ante una enfermedad letal que se propaga como un incendio descontrolado”, dicen algunos. Para otros, en cambio, “todo ese ruido [sobre la enfermedad] no son más que monsergas. Unos cuantos casos desperdigados y los periódicos lo convierten en catástrofe. Y la gente no ayuda: alguien pilla un resfriado y al momento empiezan a gritar ‘peste’”. ","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":380,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"chmad","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"4jr1l","text":"No hay nada nuevo bajo el sol, ni siquiera cuando se reacciona a amenazas nuevas como el coronavirus, y el escritor checo Karel Čapek las anticipó todas. En La peste blanca (Trad. José Luis Amores. Málaga: Pálido Fuego, 2020) la enfermedad se llama “lepra de Pekín” y se manifiesta en “manchas marmóreas […] en algún lugar del cuerpo”. No hay cura y es mortal, claro; como afirma el doctor Sigelius, director de una clínica prestigiosa, “es sencillamente la enfermedad del momento”. Pero los hechos se precipitan cuando un joven médico extranjero encuentra una cura: lo único que pide a cambio es un compromiso por parte de todos los gobiernos del mundo de que depondrán las armas; es decir, la “paz mundial”. ","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":710,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"aujpf","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"65ku3","text":"Čapek concibió mundos disfuncionales caracterizados por la confluencia de intereses económicos, ideología y novedad tecnológica, pero, por supuesto, esos mundos estaban y están lejos de ser imaginarios. Cuando el “Mariscal” visita la clínica de Sigelius para informarse de la situación, éste le dice que su contribución es “trivial e insignificante” comparada con la de “un hombre que evitó una plaga mucho peor: el azote de la anarquía, la lepra de la corrupción, la epidemia de la barbarie libertaria y la peste de la desintegración social”; al conocer las exigencias del joven descubridor de la cura, afirma: “Prefiero ver perecer de lepra al mundo entero antes que tolerar esa plaga suya: la plaga del pacifismo”. Sigelius no es sólo médico, sino también, dice, “servidor de mi patria”, y su propósito y los de la industria armamentística (representada por el “barón Krüg”) coinciden: boicotear la cura, estableciendo a cambio un “confinamiento obligatorio de los llamados leprosos [en] campos de concentración fuertemente vigilados [en los que] se los dejará morir lentamente […] bajo supervisión médica” mientras se distrae a la población con una nueva guerra patriótica. “La sensación general es de absoluta confianza”, afirma Sigelius. “¿De que se hallará una cura?”, pregunta Krüg. “No, no. De que ganaremos la guerra”, responde el médico. Pero la enfermedad también golpea a los poderosos, y pronto el Mariscal y el barón necesitan al joven médico más de lo que están dispuestos a admitir. ","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":1501,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"7hgp3","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"e7f6n","text":"El industrial y diplomático alemán German Krupp (1870-1950) se opuso a la llegada del nacionalsocialismo al poder, pero acabó apoyando a Adolf Hitler a cambio de sustanciosos contratos armamentísticos y de que éste suprimiese las protestas de obreros en sus fábricas; durante la Segunda Guerra Mundial operó con mano de obra esclava proveniente de campos de concentración (por ejemplo, de Auschwitz), pero Krupp/“Krüg” nunca fue condenado por ello. Como recuerda el editor de La peste blanca, Čapek “quiso con esta obra alertar del inminente riesgo que para Europa, y para el mundo, suponía el fascismo”. Al ser editada en España en 1937, sus traductores, Víctor Kaufmann y Federico Pascual, “cedieron los derechos de aquella primera edición ‘en beneficio de la España republicana’”. Pascual tuvo que exiliarse en México tras el golpe de Estado franquista y Čapek perdió a su hermano Josef en el campo de concentración de Bergen-Belsen, pero Krupp continúa arrojando extraordinarios dividendos desde su fusión con Thyssen. 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Uno afirma en su columna que, en su pureza ideológica, no puede “comprender” lo sucedido. No sorprende. El fracaso de las ideas democráticas en este país es producto directo de la imposibilidad de sus “intelectuales” de “comprender” cualquier cosa, excepto sus más íntimas necesidades y las del mercado. ","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":999,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"a5e0p","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"99vhb","text":"9 de mayo ","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":10,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"dkj6p","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"6mv5m","text":"Todas las crisis son distintas, pero sus causas son similares. Anoche quedó sin efecto el Estado de Alarma establecido por el Gobierno español al comienzo de la pandemia y hoy el número de personas ingresadas en Urgencias por intoxicaciones con alcohol y drogas supera el de diagnosticados con COVID-19 por primera vez en meses; hubo baños improvisados en las fuentes públicas, reuniones masivas, besos entre desconocidos, fiestas, encuentros espontáneos en discotecas y bares, bailes hasta la madrugada. La “libertad” que reclaman quienes participaron en los festejos es la muerte de los más vulnerables y los ancianos, que tendrán que soportar la previsible “quinta ola”, así como la destrucción de aún más puestos de trabajo en industrias culturales muy castigadas ya por los confinamientos y los cierres, como el teatro, las librerías y la música independiente. Lo dijo el extraordinario Heimito von Doderer, “la estupidez es de hierro y ni siquiera la fuerza de la necesidad puede romperla”. 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Como escribe la autora: “desde sus inicios, las personas de todos los grupos de la población podían reconocer mientras dormían los principios y las metas del Estado totalitario, así como sus consecuencias a largo plazo”. ","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":755,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"b513f","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"9jb67","text":"El Tercer Reich de los sueños (Trad. y Pról. Leandro Levi y Soledad Nívoli. Postf. y Not. Barbara Hahn. Logroño: Pepitas de Calabaza, 2021) es considerado un clásico de la bibliografía sobre el Holocausto, algo que su autora jamás imaginó cuando encriptaba sus notas (“familia” en lugar de “Partido”, “Tío Hans” por Hitler, “gripe” para “detención”) y las ocultaba en sus libros. En 1938 pudo sacarlas del país enviándolas a corresponsales en el extranjero que más tarde se las devolverían y, como La lengua del Tercer Reich de Victor Klemperer (Minúscula), el Diario de Hélène Berr (Anagrama) o el diario de Anna Haag recientemente publicado en Alemania (Pensar hoy no está en absoluto de moda, Reclam), son el testimonio de lo que Beradt llama “una realidad que se disponía a transformarse en pesadilla”. Uno de sus informantes le contó que cada noche se despertaba “baleado, torturado, con el cuero cabelludo arrancado, bañado en sangre, con los dientes quebrados, en frenética huida, siempre con la SA pisándome los talones”, pero el más sagaz de los testimonios de su libro es el del teólogo Paul Tillich, quien afirmó, refiriéndose a sus sueños: “en la vigilia consciente creía que podríamos escapar a lo peor, pero mi subconsciente sabía más”.","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":1250,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"17h1l","text":"___","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":3,"style":"fontsize-18"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"7hgin","text":"PATRICIO PRON","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":13,"style":"fontsize-14"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"dfqkg","text":"Es autor de libros de relatos. ensayos y novelas, entre ellas, El comienzo de la primavera, El espíritu de mis padres sigue subiendo en la lluvia y Nosotros caminamos en sueños. Fue traducido a diez idiomas y publicado en más de veinte países. En 2019 ganó el Premio Alfaguara de Novela. Vive en Madrid, donde trabaja como escritor y crítico. En Twitter es @patricio_pron","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[{"offset":0,"length":371,"style":"fontsize-14"}],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"5h5jo","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}},{"key":"f1i9m","text":"","type":"unstyled","depth":0,"inlineStyleRanges":[],"entityRanges":[],"data":{}}],"entityMap":{}}